La seguridad en el metro de Barcelona amenaza con mas acciones si no mejoran las condiciones económicas y laborales.
En torno a un centenar de trabajadores se congregaron ayer martes 14 de enero de 2025, en la plaza Sant Jaume frente al Ayuntamiento de Barcelona, convocados por el Comité de empresa de PROSEGUR, para exigir mejoras salariales y mejores condiciones laborales. La protesta también contó con la participación de vigilantes de Securitas, otra de las empresas encargadas de la seguridad en el suburbano barcelonés.
Esta situación se produce en un contexto de creciente preocupación por la seguridad en el transporte público de Barcelona, donde los vigilantes se enfrentan diariamente a situaciones de riesgo sin los recursos ni el reconocimiento adecuado.
UGT ya mostro su descontento con la situación de la seguridad del metro de Barcelona hace unos años atrás dentro de la campaña A mi quien me protege, en aquella campaña se ponía el foco en las agresiones al personal de seguridad privada en el transporte publico de la ciudad de Barcelona y alrededores.
Juan Antonio Ramos, Responsable del sector de seguridad de la UGT de Cataluña, también se pronunció en relación a las manifestaciones. “Los vigilantes de seguridad desempeñan un papel clave para garantizar la tranquilidad de los usuarios del transporte público. Es inaceptable que trabajen en condiciones precarias y sin el reconocimiento adecuado. Desde la UGT respaldamos completamente sus demandas y exigimos una respuesta inmediata de las empresas y de las autoridades competentes”, señaló.
Ayer los manifestantes denunciaron que a pesar de enfrentar mas agresiones y presiones diarias en su trabajo, por parte del cliente y de las empresas Prosegur y Securitas, no han experimentado un aumento salarial en los últimos 20 años y sus condiciones laborales están en una situación precaria poniendo el foco en la falta de taquillas, equipos de telecomunicaciones y un largo etcétera de reivindicaciones aun pendientes de solucionar.
Además, señalaron la falta de personal y la necesidad de implementar medidas de seguridad adicionales, como el patrullaje en pareja y el uso de cámaras de seguridad personales, para garantizar tanto su integridad como la de los usuarios del metro.
Jordi Angulo, portavoz de la sección sindical de UGT en Prosegur Barcelona, también hizo declaraciones sobre el devenir de las negociaciones de los últimos meses. “Hemos intentado llegar a acuerdos que beneficien tanto a los trabajadores como a la empresa, pero hasta ahora no hemos visto un compromiso real por parte de Prosegur. No descartamos tomar medidas más contundentes si no se da una solución efectiva en el corto plazo”, afirmó.
Los sindicatos que componen el Comité de Empresa han advertido que si no se atienden sus demandas en la reunión prevista para el 17 de enero podría derivar en una paralización total del servicio, generando un impacto significativo.
Raquel Fernandez , destaco la gravedad de la situación a la que se enfrentan "Los vigilantes de seguridad somos esenciales para garantizar la tranquilidad y seguridad de los usuarios del transporte público. Sin embargo, las condiciones laborales actuales no solo son insuficientes, sino que también ponen en riesgo la salud física y emocional de los trabajadores. Llevamos años reclamando mejoras salariales y equipamiento adecuado, pero seguimos sin una respuesta efectiva por parte de las empresas y las autoridades."
Mientras tanto, los usuarios del metro observan con incertidumbre, conscientes de que la seguridad en el transporte público es una cuestión que nos afecta a todos. La Secretaria General concluyó con una advertencia sobre las posibles medidas futuras: "Si nuestras demandas no son atendidas en la próxima reunión, no descartamos endurecer nuestras acciones. La seguridad en el metro no es solo una responsabilidad de los vigilantes, sino de todos los actores implicados."